Durante la jornada del viernes, la diputada de la bancada de Renovación Nacional (RN) María Luis Cordero y la senadora independiente Fabiola Campillai, zanjaron la demanda por injurias y calumnias con un acuerdo reparatorio que incluyó disculpas públicas.
«Yo, María Luisa Cordero, pido disculpas públicas por el daño causado a la senadora Fabiola Campillai (…) quiero señalar que no debí referirme a su discapacidad, ya que soy médico psiquiatra», leyó Cordero.
«Ofrezco mis sinceras disculpas por cuanto mis expresiones contribuyeron al odio», añadió.
La diputada Cordero llegó hasta la instancia jurídica tras afirmar que Campillai, quien perdió el sentido del gusto, la vista y el olfato al recibir el impacto de una bomba lacrimógena por parte de Carabineros, no era realmente ciega.
“Ella (senadora Campillai) tiene un ojo bueno, ella no es totalmente ciega (…) tiene un ojo que le funciona y el otro día un cabro la pilló hablando por celular en un pasillo, le tomó una foto y la subió a las redes. Ella no es ciega total”, comentó la psiquiatra.
Tras las declaraciones, la senadora Campillai presentó una querella por el delito de injurias graves con publicidad, además de solicitar a la Corte de Apelaciones de Santiago el desafuero de la diputada en abril de 2023.
Por su lado, Fabiola Campillai aceptó las disculpas y expresó que ya «han pasado ya diez meses desde sus injurias, ella jamás ofreció una disculpa, pero hoy ya el cansancio me hace recibirlas, pero no creer en ellas. Espero que sí sean sinceras por el bien de todos nosotros y por el bien de mi familia».