Este 25 de noviembre se conmemora el el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican que aproximadamente una de cada tres mujeres en el mundo ha sufrido violencia física y/o sexual por parte de una pareja o por terceros en algún momento de su vida.
En Chile, la primera ley implementada específicamente para este tipo de violencia se promulgó en el año 2010 bajo el nombre de Ley de Femicidio, si bien, fue un avance en materias de educación, visibilidad y compromiso con las mujeres, la medida solo se reducía a las relaciones familiares. Tras diez años de críticas y evidentes aumentos en la violencia, el 2020 entró en vigencia la Ley Gabriela, la cual amplió el marco legal al considerar femicidio cualquier asesinato a la mujer sin importar la relación establecida con el agresor.
Dentro de los avances legislativos en materia de género, el Ministerio de la Mujer destaca la reciente promulgación de la “Ley Antonia” y la Ley de reparación para víctimas del femicidio, que permite entregar una pensión a hijos e hijas de mujeres víctimas de este delito.
Conjuntamente, el Ministerio de la Mujer y la EG está dando prioridad la tramitación del proyecto de Ley de violencia integral, que lleva 6 años en el Congreso y es parte de la Agenda de Seguridad del Gobierno. Además, está impulsando modificaciones a la normativa de sociedad conyugal, para permitir una mayor autonomía de las mujeres dentro del matrimonio.
Campaña “Lleguemos a cero”
En esta línea, y como parte de la conmemoración del 25 de noviembre, el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género (SERNAMEG) presentó la campaña de sensibilización 2023 “Lleguemos a Cero. Todas y todos contamos para disminuir la violencia contra las mujeres”, un movimiento que busca contribuir a la promoción de acompañamiento para las víctimas, a través de la intervención, interpelación y denuncias cuando sea necesario.
En la oportunidad, también se presentó el Plan Nacional por el Derecho a Vidas Libres de Violencia de Género para Mujeres, Niñas y Diversidades (2022 – 2030), el principal instrumento rector en materia de políticas públicas para el abordaje de la violencia de género. Este Plan, que fue rediseñado, compromete con distintas instituciones del Estado 237 acciones para promover vidas libres de violencia de género, para prevenir, articular y fortalecer la respuesta institucional, para el acceso a la justicia y para la información y conocimiento.
Este plan actualizado considera, por ejemplo, cómo las tecnologías de información y conocimiento abren paso a nuevas formas de violencia, o cómo el Estado debe actuar para prevenir la violencia contra las mujeres, niñas y diversidades en contexto de emergencia en crisis ambientales, migratorias, entre otras. En su rediseño participaron representantes de todos los ministerios y de organizaciones de la sociedad civil.
“Todas las acciones de este plan buscan que el Estado esté presente en la seguridad pública que también involucra la violencia contra las mujeres, porque este es uno de los delitos más denunciados de nuestro país”, señaló la ministra Orellana durante el lanzamiento.
Cifras
Según la legislación chilena (Ley 21.212), el femicidio es el asesinato de una mujer ejecutado por quien es o ha sido su cónyuge o conviviente, o con quien tiene o ha tenido un hijo en común, en razón de tener o haber tenido con ella una relación de pareja de carácter sentimental o sexual sin convivencia.
También se considera femicidio el asesinato de una mujer en razón de su género cuando la muerte se produzca en alguna de las siguientes circunstancias:
1.-Ser consecuencia de la negativa a establecer con el autor una relación de carácter sentimental o sexual.
2.-Ser consecuencia de que la víctima ejerza o haya ejercido la prostitución, u otra ocupación u oficio de carácter sexual.
3.-Haberse cometido el delito tras haber ejercido contra la víctima cualquier forma de violencia sexual, sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 372bis.
4.-Haberse realizado con motivo de la orientación sexual, identidad de género o expresión de género de la víctima.
5.-Haberse cometido en cualquier tipo de situación en la que se den circunstancias de manifiesta subordinación por las relaciones desiguales de poder entre el agresor y la víctima, o motivada por una evidente intención de discriminación.
Según cifras del SERNAMEG, en lo que va del año 2023 se han registrado 37 femicidios consumados y 192 femicidios frustrados, mientras que en el año 2022 el número llegó a 43 y en el 2021 a 44. Por su lado, el 2020 culminó con 43 femicidios, tres menos que en 2019.