Durante el Concejo Municipal desarrollado en la tarde de ayer en Antofagasta, el cuerpo de concejalas y concejales decidió no aprobar el nuevo trato directo con la empresa de recolección de basura de la ciudad, tras encontrar una serie de vicios legales en la propuesta dada por el alcalde de la comuna. Tras la votación, la municipalidad deberá adoptar un plan de emergencia para evitar una emergencia sanitaria, ya que la capital regional quedará sin el servicio de recolección de basura a partir de este sábado.
En la instancia, Cecilia Aqueveque, Directora de Control de la Municipalidad, quien tras solicitud de los ediles, detalló que el nuevo contrato con Demarco S.A., el cual el alcalde esperaba que se aprobase, poseía resquicios legales, ya que se infringía el principio de eficacia y la ley de compras públicas, todo esto, debido a que no se había presentado una licitación teniendo cerca de un año para hacerlo.
En tanto, la concejala Karina Guzmán, argumentó con clara molestia el porque rechazó la propuesta del nuevo trato directo, enfatizando en la falta de celeridad que tuvo el alcalde para buscar una solución al tema.
Por su parte, durante la votación, la máxima autoridad municipal, Jonathan Velásquez, terminó absteniéndose en la decisión de este nuevo trato directo, argumentando que, de esta forma, asumía las culpas y busca responsabilizarse de la situación.
Finalmente, la votación terminó con 0 votos a favor, 4 en contra y 6 abstenciones, por lo que el nuevo contrato vía trato directo no se realizará, lo que significa que, a partir de este sábado, la ciudad de Antofagasta no contará con el servicio de recolección de basura de manera normal y será la municipalidad la que deberá implementar un plan de emergencia para evitar un desastre sanitario.
A su vez, en 20 días, dada la abstención de la propuesta y según dictamina la ley, el alcalde de Antofagasta podrá aprobar este trato directo, lo que podrá conllevar responsabilidades administrativas, civiles y legales en su persona.
