En el marco de una reunión con Alexander Lukashenko, presidente de Bielorrusia, el mandatario ruso aseguró que Moscú no representa una amenaza para el mundo mientras que Estados Unidos sí, lo cual, según el mandatario, es algo que los propios estadounidenses recalcan.
«No estamos creando amenazas para nadie. La mayor amenaza que se plantea hoy en el mundo la plantean las élites gobernantes actuales, y lo dicen ellos mismos, por cierto”, expresó Putin.
“Hace unos años, el exsecretario de Defensa, creo que el Sr. Gates, dijo que la mayor amenaza para los propios Estados Unidos proviene del Capitolio, creo, o de la Casa Blanca. Eso lo dicen ellos mismos. Pero buscan una amenaza exterior”, añadió.
De esta forma, el titular del Kremlin aseguró que Washington emplea medidas coercitivas unilaterales y la amenaza de la fuerza militar para conseguir sus objetivos en la política exterior.
“Estados Unidos intenta resolverlo todo desde una posición de fuerza o con la ayuda de sanciones económicas o restricciones financieras, amenazando o utilizando la fuerza militar. Ellos intentan enseñar a alguien, pero ellos mismos no saben hacerlo o simplemente no quieren”, recalcó el jefe de Estado.
En esta línea, Putin denunció el uso de municiones de racimo por parte de EE.UU. a manos del Ejército ucraniano a pesar de que supuestamente considera su utilización como un crimen.
“Es Estados Unidos quien utiliza municiones de racimo. En este caso simplemente a manos del Ejército ucraniano. Y aquí esta parte cree que esto es un crimen, pero se permite hacerlo. Y este es el principal problema de las relaciones internacionales”, enfatizó.
El presidente también fue consultado acerca de la visita de Kim Jong-un al país, aclarando rumores que apuntan a que dicha reunión se debió a una petición rusa para que Corea del Norte envíe voluntarios a formar parte de una operación militar especial.
“Puedo decir que esto es un completo disparate. Hace un par de días dije que 270.000 de nuestros hombres, firmaron contratos con las Fuerzas Armadas rusas. Pero era información antigua, esta mañana me informaron de que había 300.000 contratos firmados por personas que -quiero subrayarlo- están dispuestas a sacrificar sus vidas por los intereses de nuestra Patria, para proteger los intereses de Rusia”, aseguró.
“Sí, les pagamos algún dinero, que es mucho, mucho más que el salario medio mensual del país. Pero ¿puede el dinero compensar una muerte o una lesión grave? Por supuesto que no. Así que, en primer lugar, nuestros hombres que firman estos contratos se guían por los más nobles sentimientos patrióticos, imponen respeto”, concluyó.