Durante la jornada de ayer, el Senado dio un nuevo golpe al Gobierno tras aprobar y despachar la Ley de Usurpaciones sin considerar y rechazando la indicación del Ejecutivo que buscaba evitar que el proyecto se visará con la “legítima defensa privilegiada” incluida en el. Ante tal situación, el Gobierno afirmó que harán acción del veto presidencial para evitar promulgar el proyecto.
En ese sentido, la Ministra del Interior, Carolina Tohá, destacó la presencia de tres acuerdos con respecto a la ley: transformar el hecho en un delito con penas privativas de libertad, el cual debe ser considerado como uno de ejecución permanente para que siempre exista flagrancia y que se deben excluir los campamentos de esto.
Pese a ello, la autoridad, criticó el hecho que se haya aprobado la “legítima defensa privilegiada” en el proyecto, debido a que esto ampararía la violencia al permitir a que las personas recuperen el bien usurpado con sus propias manos sin mediar consecuencias.
Cabe destacar, que el Ejecutivo plantea conservar lo positivo del Proyecto de Ley de Usurpaciones, por lo que, según lo expuesto por la Ministra, el veto presidencial que se ingresaría sería solo con respecto a este concepto de “legítima defensa privilegiada”.
Frente a esto, el senador de Evopolí, Felipe Kast, criticó la determinación que tomará el Gobierno y pese a que esta herramienta está consagrada en la Constitución como una atribución presidencial, le exigió a la máxima autoridad nacional que respete la democracia y no vetará el proyecto.
Es necesario precisar, que existen tres tipos de vetos: el aditivo, el sustitutivo y el supresivo, siendo estos últimos uno de los caminos que tomaría el Gobierno, para lo cual tendrá 30 días para aplicarlo.
Cualquiera sea la vía que escojan, este veto solo podrá ser rechazado por el Congreso si es que 2/3 de los legisladores lo votan en contra, porcentaje que la oposición no posee y deja en buen camino al Gobierno para eliminar la “legítima defensa privilegiada”.
Foto: Agencia Uno