Los familiares de las víctimas del tiroteo en la escuela de Uvalde, que hace dos años resultó en la muerte de 19 niños y dos profesoras, presentaron demandas contra Meta, la empresa de videojuegos Activision, y un fabricante de armas semiautomáticas, acusándolos de promover el uso de armas e incidir en el comportamiento violento de Salvador Ramos, joven de 18 años autor de la masacre.
La demanda contra Meta y Activision se presentó en el Tribunal Superior de Los Ángeles, mientras que el caso contra el fabricante Daniel Defense fue presentado en la Corte de Distrito de Uvalde.
Josh Koskoff, abogado a cargo de estas demandas, anteriormente representó a las familias de las víctimas del tiroteo en la escuela Sandy Hook en Connecticut, donde logró una victoria legal en 2022 contra el fabricante de armas Remington. En esta nueva acción legal, Koskoff argumenta que Daniel Defense emplea la plataforma Instagram, propiedad de Meta, y los videojuegos desarrollados por Activision para influenciar a los jóvenes, incluyendo al agresor de Uvalde, a percibir «las armas como una solución para sus problemas».
Según el abogado, estas empresas tecnológicas no solo facilitan la conexión entre los fabricantes de armas y los consumidores, sino que también «fomentan y normalizan la violencia» entre un público de «adolescentes con dificultades».
En tanto, una portavoz de Activision expresó en un comunicado publicado por The New York Times su «simpatía» por los afectados, pero destacó que millones de personas en todo el mundo disfrutan de los videojuegos sin recurrir a «actos atroces».