Hace más de un mes, los profesores de la región se encuentran paralizados en espera de una solución a los problemas que presentan los establecimientos educacionales, entre ellos, destacan la mantención de infraestructura, los servicios básicos y la falta de insumos para llevar a cabo las clases.
Desde el Colegio de Profesores señalan que son 45 escuelas las que se mantienen con irregularidades que van desde lo sanitario, hasta lo estructural, con malas conexiones eléctricas, e incluso ventanas rotas. Los elementos suponen un peligro tanto para los alumnos, como los docentes.
Las precarias condiciones de la educación en la región de Atacama, quedaron al descubierto luego de un informe elaborado por el Ministerio de Educación. En el documento se describen falencias e irregularidades por parte del Servicio Local de Educación Pública (SLEP) en el uso de recursos públicos, que en la práctica, se han traducido a deficiencias generalizadas en los establecimientos.
“Nosotros hemos recibido todo el apoyo de la prensa local pero a nivel nacional hay un sesgo comunicacional y por eso estamos acá apoyando activamente como público pero también haciéndonos presentes. No es posible que las autoridades, sobre todo del nivel central, mantengan este paro”, expresó Carlos Rodríguez, Presidente Regional Atacama del Magisterio, durante una actividad de los Juegos Panamericanos.
Desde la comunidad educativa señalan que las actividades se mantendrán paralizadas hasta que “las autoridades cumplan con sus promesas de mejorar las condiciones mínimas y dignas que se merecen estudiantes y docentes de la región de Atacama”.
Insólito, profesores tienen mejor sueldo que la mayoría de personas en este país. La educación pública es peor gracias a estos incompetentes «profesores del estado».