Uno de los grandes desafíos de la minería en los últimos años ha sido avanzar hacia el desarrollo de una industria cada vez más tecnologizada y responsable con el medio ambiente y las personas, lo que ha implicado una creciente demanda de nuevos profesionales con competencias y experiencia en áreas transversales.
Esto requerirá integrar una gran cantidad de nuevos especialistas para una actual y futura incorporación de tecnología e innovación, sobre todo relacionada con el cuidado medioambiental. Es más, según datos del Estudio de Fuerza Laboral de la Gran Minería Chilena 2023-2032, realizado por la Alianza CCM-Eleva, adherentes de la Red Compromiso Minero, se pronostica que durante la próxima década (hacia 2032) se necesitarán 34 mil nuevos talentos para la minería.
Bajo este escenario las universidades y centros de formación técnica y profesional son los grandes protagonistas en la labor de ofrecer a los alumnos carreras y mallas adecuadas a los nuevos tiempos y las nuevas necesidades que van requiriendo las industrias, como la minera, cuya industria sigue creciendo.
Desde INACAP, adherentes de Compromiso Minero, cuentan con un Centro de Energías Renovables y un laboratorio de Energía donde les permiten a los estudiantes probar tecnologías reales para la minería. También han incorporado el metaverso como recurso de aprendizaje en las asignaturas de minería para mejorar la calidad del aprendizaje, aumentar el interés de los estudiantes, acercarlos a lugares de difícil acceso, y prepararlos mejor para enfrentar los desafíos del mundo real en la industria minera, en un ambiente controlado. Es una forma innovadora y efectiva de abordar la educación en esta área y mantenerse a la vanguardia de la tecnología educativa.
Sacha Krause, Subdirector de la Escuela de Ingeniería de Duoc UC, adherente de Compromiso Minero, destaca que “buscamos estar alineados y a la vanguardia en todos los planes formativos, incorporando valor, integrando desarrollo tecnológico, requerimientos sectoriales, para lo cual realizamos constantes actualizaciones de los programas de estudios, levantando información de los diferentes actores involucrados, tales como empresas, estudiantes, docentes y titulados con el fin mejorar continuamente las mallas curriculares y los perfiles de egreso”.
Lo anterior está relacionado con que, para alcanzar una minería más responsable, las personas con talentos y habilidades vinculadas a la transformación digital y tecnológica son clave, específicamente en áreas como energías renovables y/o autosustentables, análisis de datos, inteligencia artificial, robotización, operación remota, y automatización. Son la llave para empujar proyectos futuros e incluso algunos que ya están en curso.
Para Natalia Morales, gerenta de la Alianza CCM-Eleva, adherente de Compromiso Minero, señala que “es importante que, de manera transversal, en los distintos cargos, exista un manejo de competencias digitales y tecnológicas, así como buena capacidad en análisis de datos”. Y agrega que “el desafío del país está en poder generar acciones de vinculación formativo-laborales para este segmento joven, ya que tenemos que avanzar en completar la gran demanda que tenemos de puestos de trabajo, de acá al 2032”.
Esta gran demanda especialistas se explica, también, por la puesta en marcha de nuevos proyectos y expansiones en las distintas regiones mineras del país, como son la entrada en operaciones de Quebrada Blanca 2 (Teck) en Tarapacá; Salares Norte (Gold Fields) en Atacama hacia finales del 2023, la puesta en marcha del Distrito Minero Centinela (Antofagasta Minerals) en la región de Antofagasta y de Los Bronces Integrado (Anglo American) en la región Metropolitana a partir del 2026.
Como se trata de algunos proyectos nuevos, desde su concepción incorporan innovaciones como el uso de agua de mar desalada y la teleoperación a distancia, todos avances tecnológicos que no sólo mejoran la eficiencia de los procesos, sino que también minimizan el impacto ambiental, considerando las metas de descarbonización a 2050 establecidos en Chile.
Paulina Jaramillo Osbén lo sabe bien desde su posición como la primera gerenta general en Anglo American y en Chile, también adherente de Compromiso Minero, y destaca que “permitirnos estar conectados sin estar presentes ha sido el mayor logro de este proceso de cambio tecnológico”.
Si bien las nuevas tecnologías tendrán impacto en funciones de todos los espacios de trabajo de la industria, el estudio de CCM-Eleva estima que el 75% de la demanda de profesionales para los próximos diez años se concentrará específicamente en cinco perfiles: mantenedores mecánicos, operadores de equipos móviles, operadores de equipos fijos, supervisores de mantenimiento y supervisores de extracción, en particular por las tecnologías de operación remota y digitalización.