El Gobierno liderado por Javier Milei ha dado a conocer este jueves su decisión de suprimir el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi) de Argentina, como parte de su estrategia primordial de reducir el tamaño del Estado y los gastos públicos para permitir una disminución en los impuestos.
El portavoz presidencial, Manuel Adorni, comunicó durante su habitual conferencia de prensa en la sede del Ejecutivo que el cierre del Inadi marca el inicio de una serie de clausuras o desmantelamientos de institutos estatales planeados por la administración actual. Adorni enfatizó que la medida afectará al Inadi, que cuenta con alrededor de 400 empleados y diversas delegaciones en todo el territorio argentino.
Además, Adorni explicó que el Gobierno considera injusto que los ciudadanos continúen sufragando con sus impuestos una institución como el Inadi. Sin embargo, reconoció que los procesos burocráticos para eliminar estas delegaciones requieren más tiempo del esperado.
Previamente, el Ejecutivo había extendido la intervención del Inadi por 180 días y había nombrado a María de los Ángeles Quiroga como interventora, mediante un decreto publicado en el Boletín Oficial.