Durante la jornada, el diputado Gonzalo de la Carrera dio a conocer una carta de 27 criminales de lesa humanidad que se encuentran recluidos en Punta Peuco, en donde reconocen y afirman haber cometido violaciones a los derechos humanos.
En la misiva los reclusos comentan que «en el cumplimiento de nuestros deberes y en la forma como los entendíamos en esa época, muchas de nuestras acciones produjeron violaciones a los derechos humanos con graves consecuencias».
Ante esa situación, refieren que se debe a la formación que tenían, sosteniendo «que daba más importancia a la obediencia que al respeto por el que se consideraba adversario«.
A su vez, explican que han esperado 33 años para que sus superiores asuman la responsabilidad de sus ordenes, lo que ha hecho que sus fieles subalternos, como ellos los nombran en la carta, estén encarcelados.
Tras ello, los firmantes solicitan que para los 58 reclusos de rangos más bajos (suboficiales, clases, soldados y empleados civiles) haya conmiseración del poder político y judicial.