Por primera vez en la historia de Compañía Minera del Pacífico, su sindicato Planta Directiva Profesional estuvo a punto de ir a huelga, después de llevar a última instancia las negociaciones en el marco del proceso de firma de contrato colectivo.
No obstante, durante la jornada del lunes y aunque no hubo modificación de la última oferta de la empresa, los y las trabajadores pertenecientes a dicho sindicato, decidieron votar aceptar lo propuesto por la empresa y firmar un nuevo periodo de contrato colectivo.
A través de sus redes sociales, la dirigencia del sindicato informó que con un 83% de los votos válidamente emitidos, se daba por aceptada la última oferta de la empresa, en tanto manifestaron que “queremos agradecer el apoyo en estos dos meses de negociación (…) en los que tratamos de estar a la altura de conseguir derechos y desafíos que el rol PDP merece por su imprescindible aporte al negocio”.
Cabe señalar que, inicialmente la empresa había llamado a una negociación anticipada, situación que el sindicato formado en 2017 rechazó esperando el proceso obligatorio, tras el cual no se llegó a un acuerdo con lo que se inició el actual proceso de negociación mediada, en el cual participa la Dirección del Trabajo.
El sindicato señaló que las mayores brechas para llegar al acuerdo estuvieron relacionadas con que sólo algunos de los socios del sindicato se verían beneficiados con el aumento de sueldo, sin embargo, desde la empresa explicaron que desde antes de las negociaciones, las escalas de trabajadores habían sido mejoradas y que con el convenio se buscaba alcanzar a la totalidad de los integrantes del sindicato.
Aún cuando se mantuvieron las diferencias, el acuerdo salió adelante y se evitó la huelga que hubiera sido la primera en la compañía protagonizada por supervisores. A este respecto, Carolina Lomuscio Zamorano, Gerente de Personas de CMP indicó que “creemos que este nuevo instrumento colectivo refleja la voluntad de las partes por mantener un entorno de trabajo positivo y productivo, coherente con nuestro propósito como compañía y en línea con los intereses de los socios; mejorando y ampliando beneficios que a su vez permitan proyectar a CMP hacia un futuro sostenible”.
Expectativas del hierro versus cobre
El contexto que enmarca lo que sería la primera huelga de un sindicato de supervisores en CMP es complejo, toda vez que desde la compañía afirman que los últimos cinco años han sido de una transformación fuerte en los estándares de CMP.
Este sindicato cuenta con más de 300 socios entre las regiones de Atacama y Coquimbo y aun cuando las cifras de los bonos de término de conflicto siempre impactan a la ciudadanía, el caso del hierro guarda ciertas diferencias de precio respecto de las cupríferas.
Los cambios que ha experimentado la compañía consideran el aumento a un 60% de la dotación femenina a nivel directivo, además de 30% en jefaturas y superintendencias.
A considerar, las ganancias del cobre son superiores a las de hierro, aun cuando esta industria supera con creces las toneladas embarcadas para exportación. La cotización del hierro, sin embargo, no tiene la misma competitividad del cobre y, por lo tanto, aun cuando los volúmenes son mayores, el precio siempre es distinto.
También figura como diferencia, que las faenas, en general, se encuentran a nivel del mar, cerca de los asentamientos urbanos que permiten que los trabajadores lleguen cada día a casa y no tengan que vivir en campamentos, entre otras cosas.
Con este nuevo proceso de negociación cerrado exitosamente entre la compañía y sus trabajadores, CMP se posiciona como una atractiva alternativa para los y las profesionales de las regiones de Atacama y Coquimbo, lugares de donde provienen prácticamente el 98% de sus trabajadores.