Ante la reciente alerta meteorológica que afecta a la región de Atacama, el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (SENAPRED), en conjunto con el Comité para la Gestión del Riesgo de Desastres (COGRID) Regional, ha intensificado la coordinación y el monitoreo de la situación para asegurar la respuesta oportuna en áreas que necesitan asistencia, como agricultura, energía, conectividad de carreteras, salud y educación.
El plan de acción incluye el seguimiento de estaciones meteorológicas y la activación de medidas preventivas, especialmente en zonas propensas a deslizamientos de tierra, con el objetivo de prever posibles remociones en masa y minimizar los riesgos para la población. Esta labor preventiva se realiza en distintos puntos críticos de la región, donde ya se han desplegado equipos de monitoreo.
En paralelo, se está llevando a cabo la entrega de kits de emergencia a las familias más vulnerables, asegurando que cuenten con los insumos necesarios para enfrentar eventuales complicaciones derivadas del mal tiempo. Los kits incluyen alimentos no perecibles, agua potable, frazadas y elementos de primeros auxilios.
La seremi de Gobierno, Sofía Vargas Roberts, subrayó la importancia de la articulación entre los distintos organismos gubernamentales: «Estamos trabajando incansablemente para que todas las áreas que necesiten asistencia cuenten con el apoyo adecuado, desde la agricultura hasta la conectividad vial. Nuestro objetivo es garantizar la seguridad y bienestar de las familias de Atacama.»
Este operativo se realiza bajo estricta supervisión del COGRID Regional, que ha mantenido comunicación constante con los municipios, instituciones de salud y educación, y otros actores clave, para garantizar que la respuesta sea coordinada y efectiva en cada sector. SENAPRED reitera su llamado a la ciudadanía a mantenerse informada a través de los canales oficiales y a tomar las precauciones necesarias ante posibles riesgos, mientras continúa el despliegue de equipos de emergencia en terreno.
