Al lugar se dirigieron el Delegado Presidencial Rubén Quezada y la Seremi de Salud Paola Salas.
Con pasillos totalmente inundados se encontraba el hospital San Pablo de Coquimbo durante el fin de semana pasado, producto de las fuertes lluvias que se sintieron en la zona. Un panorama que no cambió, debido a las actuales precipitaciones que se están registrando en la región y sobre todo que afectan gran parte de la infraestructura de urgencias del Hospital San Pablo de Coquimbo.
Tras denuncias de la ciudadanía el delegado presidencial Rubén Quezada se dirigió hasta las instalaciones donde parte del cuerpo medico se encontraba con baldes e impermeables:
Por su parte la seremi de salud Paola Salas explicó que a pesar de que algunos sectores del hospital se encontraran inhabilitados no se va a suspender la atención para urgencias.
De igual manera la farmacia se encuentra operativa para aquellos pacientes con condiciones criticas y se hace el llamado a la comunidad de solo asistir al hospital si es completamente necesario.