Un pescador de jibia resultó con su mano derecha cercenada, luego de la explosión de un elemento que recogió mientras navegaba, junto a un compañero, en altamar.
El hombre de 45 años, tomó un objeto que flotaba en el agua y, tras extraer su contenido, lo encendió, lo que provocó una explosión que, junto con dañar su mano, terminó con lesiones en su cuello y rostro.
El subprefecto José Ortega, jefe de la Brigada de Investigación Criminal de la PDI Coquimbo, señaló que los hechos ocurrieron a la altura del sector conocido como Boca del Guayacán.
Funcionarios policiales levantaron evidencia desde la embarcación, a fin de ser periciada por expertos del Laboratorio de Criminalística Regional y establecer la dinámica del hecho.