La Segunda Sala de la Corte de Apelaciones de La Serena ordenó la prisión preventiva de dos carabineros imputados por apremios ilegítimos, revocando así la resolución de primera instancia donde quedaron sujetos a las cautelares de prohibición de acercarse a la víctima, firma mensual y arraigo nacional.
El 16 de junio, los carabineros F.M.G.C. y J.E.A.O., pertenecientes a la Subcomisaria de Fuerzas Especiales de La Serena, fueron formalizados por el Ministerio Público como autores de los delitos de tortura y de falsificación de instrumento público perpetrados el 22 de noviembre de 2019, en el marco de la revuelta social.
Audiencia en la que el Juzgado de Garantía de La Serena acreditó los elementos constitutivos de ambos delitos, pero estimó que no había elementos suficientes para establecer la participación de los imputados, razón por la cual no accedió a la solicitud de prisión preventiva.
Tras acoger los recursos de apelación presentados por el Ministerio Público y las partes querellantes, el ministro Sergio Troncoso señaló que no hay elementos suficientes para calificar el delito como tortura.
El magistrado agregó que existen los antecedentes para establecer la participación de ambos carabineros en los hechos y agregó que libertad de los imputados constituyen un peligro para la seguridad de la sociedad.
Tarcila Piña, directora regional del Instituto Nacional de Derechos Humanos Coquimbo, destacó la decisión del tribunal del alzada, porque se trata de la primera formalización en la zona calificada como un delito de tortura por el Ministerio Público.
Según el ente persecutor, aproximadamente a las 21:00 horas del 22 de noviembre de 2019, en las inmediaciones de Avenida Balmaceda con Avenida Francisco de Aguirre, La Serena, los imputados F.M.G.C y J.E.A.O., funcionarios de Carabineros pertenecientes a la Subcomisaria de Fuerzas Especiales, en los momentos que intervenían en una manifestación, detuvieron a un menor de 13 años de edad y, junto a otros tres funcionarios no identificados, procedieron a agredirlo con golpes de luma en el rostro y diferentes partes del cuerpo, trasladándolo en calidad de detenido a la Primera Comisaría de La Serena.
La detención de la víctima redundó en la emisión de un parte de la Primera Comisaría de La Serena con todos sus anexos, entre ellos la información proporcionada por los imputados, relatando con detalles que la víctima había formado parte de la manifestación y que los manifestantes lo habrían lesionado en momentos que huían. Hecho sustancialmente falso que propició que el Juzgado de Familia de la Serena iniciara una causa por medida de protección en favor del afectado.