Carlos III, de 74 años, y su esposa, Camila, han sido coronados durante este sábado como reyes del Reino Unido en la Abadía de Westminster Londres, en una solemne ceremonia de 90 minutos que estuvo presidida por el arzobispo de Canterbury, Justin Welby. La investidura con la corona a Carlos y posteriormente a Camila ha sido el principal momento del acto, que siguieron un aproximado de 2.000 asistentes a la intemperie bajo una lluvia intermitente en Londres y millones de espectadores a traves de las pantallas.
Los actuales reyes después de la coronación hicieron el primer saludo real a la multitud en el palacio de Buckingham, acompañados por los príncipes de Gales con sus tres hijos y los hermanos del rey Eduardo y Ana.
De igual manera la ceremonia no estuvo exenta de polémica ya que a primeras horas de la mañana, la Policía Metropolitana de Londres llevaba a cabo media docena de arrestos. Entre los detenidos, Graham Smith, el fundador y director de la organización Republic el cual según registros llevaba meses preparando las protestas en la calle para alterar la ceremonia, bajo el lema “not my king” (no es mi rey). Había congregado a 2.000 seguidores bajo la estatua de Carlos I -lugar donde pasaba la carroza real- los cuales fueron disipados por la policía.