Control territorial, migratorio y expulsiones: Esos serán los ejes del Programa de Control Territorial Focalizado, que esta mañana la ministra del Interior, Carolina Tohá, le presentó al Presidente Gabriel Boric, el cual forma parte de la potente agenda de seguridad impulsada por el Gobierno.
El mandatario, junto a la ministra Carolina Tohá y el general director de Carabineros Ricardo Yáñez, entregaron detalles de la estrategia que consiste en una focalización del Plan Calle sin Violencia, con un plan piloto en la Región Metropolitana y cuyas medidas fueron trabajadas en conjunto con Carabineros y la Policía de Investigaciones es así como indicó que: «Estamos trabajando, en conjunto, sin pausa, para ganarle la batalla a la criminalidad de nuevo tipo que pretende enseñorearse con nuestras ciudades y no lo van a lograr».
En ese sentido, el Programa contempla tres fases de intervención:
- Control territorial: busca frenar los delitos violentos y el uso de armas de fuego vinculados a personas con órdenes de detención pendientes, extranjeros con orden de expulsión vigente y extranjeros en situación irregular no inscritos en el proceso de empadronamiento. Incluye a 250 Carabineros de distintas unidades y especialidades, 54 vehículos y cuatro equipos de prevención de control de armas. Esto se traduce en fiscalizaciones, controles, detenciones y retenciones de personas con órdenes de aprehensión pendientes, antecedentes de comisión de delitos o en situación migratoria irregular. En caso de no presentar documento de identidad, la persona extranjera será trasladada a un cuartel de la PDI.
- Control migratorio: medidas para apoyar las acciones de control migratorio y búsqueda de personas con órdenes de detención pendientes, extranjeros con orden de expulsión vigente y extranjeros en situación irregular no inscritos en el proceso de empadronamiento.
- Expulsiones: medidas administrativas y cambios legales para mejorar la capacidad de hacer efectivas las expulsiones migratorias.