La Mesa Regional de Seguimiento de Compromisos en Educación Atacama, compuesta por autoridades, dirigentes del Colegio de Profesores y apoderados, redactaron 5 importantes puntos para tratar la crisis en la educación que vive en Atacama. La situación mantiene 46 establecimientos paralizados y 30 mil alumnos sin clases hace dos meses.
Una de las primeras medidas que se consideraron relevantes apunta a decretar un estado de emergencia educacional. Esto debe ser determinado por la ministra del Interior, en esta línea, se solicitará una reunión con ella. Otro punto señalado apela a la continuidad al Plan de Inversiones que se viene ejecutando en la región, con el fin de resolver las diferencias entre Slep y la comunidad educativa.
La mesa de trabajo también consideró oportuno solicitar al Mineduc el cierre anticipado del año escolar con medidas pedagógicas flexibles. Por otro lado, se solicitó a la Agencia de la Calidad de la Educación que evalué la suspensión del Simce para las provincias de Chañaral y Copiapó.
Por último, se acordó que el director del Slep oficiará a los directores y directoras para que al momento de efectuar los trabajos en los establecimientos no haya alumnos.
Al respecto, el Gobernador de Atacama, Miguel Vargas Correa señaló “aquí se definieron, en primer lugar un conjunto de obras en 60 establecimientos educacionales de la región, principalmente en una primera etapa condiciones mínimas habilitantes, pero también se acordó darle celeridad a los compromisos de mediano y largo plazo, poniendo mucho énfasis en lo importante que es que avance el Convenio de Programación que se ha planteado entre el Gobierno Regional Atacama y el Ministerio de Educación, que permitiría materializar una gran inversión en los colegios de la región, estamos hablando de inversiones que superarían los 300 mil millones de pesos, en un horizonte de tiempo de diez años”.
En torno a la petición de evaluar la posibilidad del cierre del año escolar, la primera autoridad de la región de Atacama dijo “eso es lo que se solicita desde la mesa, que el Ministerio de Educación, a través de la Subsecretaría, evalúe cómo se podría aplicar algún plan pedagógico que permita poner término al año escolar, porque estamos partiendo de la base que no es viable que se pueda cumplir con el compromiso de tener terminadas las obras mínimas habilitantes en los establecimientos educacionales.”
“Creo que aquí se ha hecho un acto de sinceridad y de realismo, y de no generar expectativas que no son. Por lo tanto, desde la mesa se hace este planteamiento, que se evalúe dada esta condición de emergencia, dada esta condición excepcional que tenemos en Atacama, particularmente en las provincias de Copiapó y Chañaral, un cierre del año escolar y para ello se solicita que se impulsen planes pedagógicos flexibles dependiendo de la realidad de cada unidad educativa”, agregó.
Por su parte, Yiariela Ardiles, presidenta del Colegio de Profesores y Profesoras de Copiapó, señaló que, si bien existía un cronograma de trabajos acordado en los establecimientos afectados para cumplir con las condiciones mínimas habilitantes, este no se ha cumplido en los tiempos establecidos.
“Lo que se establece en esta mesa es que se declare emergencia educacional, ya que los recursos el Slep no los tiene. Claramente les llegaron hoy día mil 700 millones pero los reparten y lo que va a quedar son 3 mil y tantos millones que no les alcanza para reparar los establecimientos, menos para las condiciones medias. Entonces claramente no llegaron nunca con los recursos frescos como nosotros se lo dijimos cuando inició este conflicto, solamente esas son modificaciones presupuestarias de la DIpres”, sostuvo Ardiles.
Cabe recordar que los docentes pertenecientes a establecimientos dependientes del Slep en Atacama, llevan dos meses de paralizaciones esperando que se solucionen temas básicos de infraestructura y recursos para llevar a cabo la enseñanza.