Los visitantes recorrieron distintas galerías, conocieron el proceso y las maquinarias utilizadas para la extracción del mineral, y compartieron un almuerzo con sus familiares para sellar el grato encuentro.
Fueron tres jornadas de diálogo con las agrupaciones sociales del campamento minero para comenzar a confeccionar las normas para las futuras intervenciones que tendrá el casco histórico.