_Según el informe de la CMF correspondiente a junio de 2023, el grupo de personas entre 40 y 45 años exhibe el mayor nivel de endeudamiento, con una deuda promedio de $6.3 millones.
La Comisión para el Mercado Financiero (CMF) ha presentado un informe revelador sobre el endeudamiento de la población, destacando que aproximadamente el 20% de los deudores enfrenta una «alta carga financiera». Esta cifra, aunque menor que la registrada en el mismo período del año anterior, plantea preocupaciones sobre la salud financiera de una significativa parte de la población.
Al respecto, Benjamín Jordan, director de expertosendeudas.cl, analizó las cifras y explicó que “los números coinciden en variados puntos con otros informes de igual prestigio, lo que nos da una impresión global que según CMF la mediana de la deuda es de $2,2 millones”.
Según el abogado, “el análisis de la mediana de la CMF se asemeja con el análisis de promedio de Equifax USS y revela que el endeudamiento en Chile es muy profundo, lo que significa que las personas que tienen deudas morosas deberían ganar más del doble de su sueldo para cubrir sus compromisos financieros mensuales y eso explica el crecimiento del endeudamiento en todos los periodos”.
El documento de la CMF además reveló que el grupo de personas entre 40 y 45 años exhibe el mayor nivel de endeudamiento, con una deuda promedio de $6.3 millones. Este fenómeno se correlaciona fuertemente con las decisiones de compra de vivienda, sugiriendo que las obligaciones hipotecarias son uno de los principales impulsores de esta carga financiera.
Para Cristián Lecaros de Inversión Fácil, los indicadores “tienen mucha relación con mayores tasas de interés a nivel de crédito hipotecario e inflaciones que fueron superiores al 10% en años anteriores, sobre todo por efectos de la postpandemia en cuanto a las ayudas del Estado sumado a los retiros. Y todo eso impactó finalmente en que las personas tomaran menos obligaciones financieras y también creó personas que ocuparon ese tipo de retiros también para pagar obligaciones existentes”.
En el desglose por género, los hombres presentan una mayor participación en el número de deudores (49,3%) respecto de las mujeres (46,8%), pero el monto de la deuda de las mujeres ($1,7 millones) es casi la mitad que la de los hombres ($3,3 millones).
Sobre esto, Lecaros explicó que “normalmente, el comportamiento histórico -se ha visto en todos los reportes en general que he leído y que he analizado- siempre muestran que el hombre tiene deudas mucho mayores en número de veces que la mujer, y tiene que ver con que el hombre también tiene en promedio mayores ingresos disponibles que la mujer; un enorme desafío que aún queda a nivel de paridad de pago por nivel de profesionalidad y experiencia”.
En cuanto a la evolución de las cifras de endeudamiento de los chilenos, Claudio Cáceres Valdebenito, economista del Observatorio Económico Universidad Bolivariana, detalló que “la deuda mediana de los hogares pasó de cerca de los $3.200.000 el año 2019 a $2.284.000 el 2022, una reducción de un 28,6%. También si una familia debía el equivalente al 21,9% de sus ingresos mensuales, el 2022 la familia tenía el equivalente al 17% de sus ingresos destinado al pago de obligaciones financieras. Finalmente, el año 2019 teníamos un endeudamiento de 4,4 veces los ingresos mensuales y durante el 2022 el endeudamiento había bajado a 3 veces sus ingresos mensuales”.
Con esto, “el endeudamiento ha ido descendiendo conforme a la menor disponibilidad de recursos por la contracción que efectuó el banco central, este informe nuevamente ratifica que el sistema financiero sigue reaccionado a estas restricciones vía tasa de interés que el banco central ha llevado adelante. Esperamos que el endeudamiento de los agentes económicos siga esta mejor trayectoria y que debe ir acompañado por la educación financiera que todos deberíamos tener”, subrayó.
Finalmente, los expertos coinciden en que el informe de la CMF pone de manifiesto la complejidad del endeudamiento en Chile, destacando la necesidad de abordar tanto las causas estructurales como las contingencias económicas para garantizar la estabilidad financiera de la población.